Pero hay un tercer aspecto del lenguaje que es igual de importante: cómo usamos el lenguaje en el mundo real. Ya en 1978, Bloom y Lahey publicaron un práctico marco para recordarnos estos tres importantes aspectos del lenguaje:

Pragmática

La pragmática es el estudio de cómo se utilizan las palabras, o el estudio de los signos y símbolos. Un ejemplo de pragmática es cómo la misma palabra puede tener diferentes significados en diferentes entornos. Un ejemplo de pragmática es el estudio de cómo las personas reaccionan ante diferentes símbolos. sustantivo.

Retrasos y transtornos en el uso del Lenguaje Social

El uso del lenguaje también se denomina "pragmática" o "lenguaje social". Los retrasos o trastornos en el uso del lenguaje pueden causar problemas en :

Las conversaciones y la interacción social: por ejemplo, una mala escucha, la incapacidad de iniciar o terminar una conversación, o de mantenerla, una mala toma de turnos, preguntas y respuestas inapropiadas o irrelevantes; la incapacidad de arreglar las conversaciones cuando algo va mal; y la incapacidad de cambiar de estilo en diferentes entornos (por ejemplo, el patio de recreo frente al director; o el lugar de trabajo frente al pub).
La forma de hablar: por ejemplo, hablar demasiado alto o demasiado bajo, hablar demasiado rápido o demasiado despacio, murmurar o tropezar con las palabras, o hablar con una voz monótona o sobreexcitada.
El lenguaje corporal: por ejemplo, poco contacto visual, malas expresiones faciales, malos gestos con las manos, estar demasiado cerca de los demás, tocarse de forma inapropiada, estar inquieto, mala postura y apariencia personal.
Asertividad: ser demasiado pasivo o agresivo a la hora de expresar los sentimientos, defenderse, hacer sugerencias, negarse, estar en desacuerdo, quejarse, disculparse y pedir explicaciones.
Al igual que ocurre con la forma y el contenido, la mayoría de las personas adquieren las reglas de uso del lenguaje automáticamente al interactuar con los demás. Pero algunos niños y adultos con trastornos o retrasos del lenguaje pueden tener dificultades para entender y aplicar las reglas. Puede que no sean capaces de captar las señales que nos indican lo que piensan los demás. Pueden tener dificultades para integrar el lenguaje y los distintos contextos sociales. Puede que no sean capaces de generar inferencias a partir de las situaciones, entender frases hechas o metáforas, o contar chistes e historias.

La falta de habilidades lingüísticas sociales puede tener efectos devastadores en la calidad de vida, la participación, el aprendizaje y el trabajo de una persona. Los logopedas están capacitados para evaluar las habilidades sociales del lenguaje y para ayudar a las personas con problemas de lenguaje social enseñándoles explícitamente las habilidades que necesitan para utilizar el lenguaje en los entornos más importantes para ellos.

Video Lenguaje Social